Hoy, por primera vez, fuimos los cuatro al cine. Elegimos, por supuesto, una película para chicos. La traducción al español sería "Venganza peluda". Se trata de un hombre que se muda junto con su familia al medio de un bosque para desarrollar un proyecto inmobiliario. Los animales del lugar, al enterarse, complotan contra este plan ya que ven el daño al ecosistema que va a ocasionar. Acá está el trailer de la película:
Le teníamos mucho miedo a Renzo ya que en otra oportunidad se había asustado al estar en una sala a oscuras. Llegamos al cine y, mientras Nancy compraba pochoclo y Coca, los llevé a los dos a la sala para que se fueran ambientando. Renzo entró, vio las penumbras, y dio media vuelta. Nos fuimos a sentar afuera.
A la hora de la película entramos y Renzo iba muy despacio, como si alguien lo fuera a atacar. Nos sentamos y poco a poco fue entrando en onda. Vio las colas de las películas y se empezó a reir, comía pochoclo y tomaba Coca. Y empezó nuestra película...
Al principio no decía nada pero al rato comenzó a comentar las escenas a los gritos, se reía a lo Renzo, su carcajada ya es una marca registrada. Por suerte en la sala había otros jetones, así que lo de él pasaba desapercibido. Risas van, risas vienen, más Coca por acá, una visita al baño y, de la nada, Oriana estaba llorando a moco tendido. Qué pasó?, pregunté. La nena se impresionó con las maldades que los animalitos le hacían al protagonista.
Salí al hall con Oriana, le conté que tan solo era una película pero no podía parar de llorar. Tomó coraje y volvimos a entrar. Tan solo un rato porque a los pocos minutos tuvimos que volver a salir. Lo mismo...allá vamos a intentarlo de vuelta.
Y cuando volvimos a nuestras butacas, lo encontramos a Renzo llorando desconsoladamente. Parece ser que la aparición del oso (que sabía de antemano ya que lo había visto en la tele y había gritado varias veces que iba a suceder) lo impresionó demasiado. Dos minutos y los saqué. Nancy quedó disfrutando el show.
Caminamos por el hall, uno en cada mano, los dos llorando como si lo hubieran visto a Spongebob morir. Pero se ve que el orgullo podía más que su miedo, así que volvimos para ver los últimos diez minutos.
The end.
Volvimos a casa, casi sin hablar del episodio. Los cambiamos rápido y a la cama. Abajo a ver un poco de tele los dos y descansar...por unos minutos: Renzo apareció y se me tiró encima. Lo que nunca: se durmió en mis brazos. Lo llevé a su camita.
Antes de irme a dormir, como todas las noches, lo llevé a hacer pis. Pero esta vez fue distinto. Abrió los ojos como nunca y cuando lo acosté para que siguiera durmiendo no los cerró. Le fui a dar un beso a Oriana que ya estaba durmiendo pero la noté sobresaltada.
Tres minutos más tarde aparecieron los dos en nuestro dormitorio diciendo que tenían miedo. Se quedaron durmiendo con Nancy; yo dormí en la cama de Renzo.
Una velada para el olvido, aunque Oriana y Renzo no creo que opinen lo mismo.
